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Montería. Desde el año pasado la comunidad de la vereda Loma Grande en zona rural de Montería ha venido reclamando por la presencia de lixiviados en los alrededores del relleno sanitario y durante varios meses ese lugar prácticamente estuvo cerrado por el bloqueo de los habitantes, que exigían el retiro de ese líquido que puso en jaque la salud de todos ellos.
Luego de meses de conversaciones, asambleas y diálogos con las autoridades, así como con la empresa Urbaser, que opera el relleno sanitario de Loma Grande, se lograron varios acuerdos. El 10 de diciembre llegó a esa vereda una planta de ósmosis inversa que la compañía se comprometió a instalar para evacuar el agua represada. A su turno, la Alcaldía de Montería se asumió la responsabilidad de lograr los permisos de servidumbre de los propietarios de los predios aledaños al relleno para que los operarios pudieran adelantar su tarea.
Los bloqueos de la comunidad fueron constantes y aunque por varios meses todo parecía estar en calma, ayer nuevamente se tomaron las vías de hecho para solicitar que los lixiviados que están por sus calles no los afecte más.
Casi siete meses después de llegar a los señalados acuerdos, la comunidad de Loma Grande se cansó de esperar y con las lluvias de los últimos días el tema de los lixiviados se acrecentó. Por eso ayer los habitantes decidieron protestar y bloquearon la vía que comunica a Montería con Medellín, provocando un enorme trauma vehicular desde el kilómetro 6 casi que hasta el Kilómetro 15.
Luego de cerca de seis horas de bloqueo, funcionarios de la Administración Municipal lograron persuadir a los manifestantes que sobre las 2:30 de la tarde levantaron el bloqueo.
Y es que el tema del relleno sanitario de Loma Grande parece haberse salido de competencia de las autoridades locales, esto debido a que en noviembre del año anterior, la ministra del Medio Ambiente, Susana Muhamad, anunció que tanto su cartera como la Agencia Nacional de Licencias Ambientales (Anla), asumían la competencia para realizar la evaluación y control respectivo del relleno sanitario a cargo de Urbaser, lo que prácticamente maniató a la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y del San Jorge (CVS), que como autoridad ambiental en Córdoba era la competente para tomar decisiones al respecto.
El Meridiano habló con el secretario de Gobierno Municipal, Óscar Ospitia, quien manifestó que se acordó con los voceros de la comunidad iniciar unas mesas de diálogo con el fin de solicitarle a la Anla información sobre el plan de acción que se estableció con Urbaser y verificar si hay cumplimiento de lo que se firmó.
La planta de ósmosis inversa llegó a Loma Grande el 10 de diciembre de 2022. Siete meses después, Urbaser no ha podido retirar una sola gota del agua represada por la falta de permisos.
No hubo permiso
De igual manera, el funcionario le confirmó a este medio que fue imposible lograr el permiso de servidumbre con la propietaria de una finca del sector, por lo que estudia un plan B, el cual consiste en llevar la tubería por un lindero aledaño con un humedal de la zona, pero para ello se requiere de una autorización de la CVS. La inquietud, es que esa entidad responda que no tiene competencia para tomar decisiones en torno al relleno sanitario y una vez se quede en manos de la Anla.
"La comunidad nos informó que ha tratado de buscar explicaciones por parte de la Anla, pero no hay respuesta a sus comunicaciones, por eso la Alcaldía de Montería junto a los habitantes de Loma Grande intentaremos conocer qué se acordó con la empresa para superar la emergencia", sostuvo Óscar Ospitia.