En tres meses debe estar finalizado el dragado en el canal La Esperanza para reducir el flujo de agua en el sector.

Cordobeses y sucreños no quieren sorpresas con las obras que se ejecutan y que tienen como propósito cerrar el boquete que el río Cauca abrió en la Mojana y que se conoce como Cara de Gato. Por eso es importante que existan veedurías desde distintos sectores para hacerle un seguimiento a esos trabajos, que empezaron a generar cierta preocupación. Y como es sabido, las inquietudes radican en que el dragado en el canal La Esperanza se agilice y pueda culminarse antes de iniciar la temporada invernal, porque de no hacerse sería casi que imposible cumplir el objetivo de cerrar la señalada boca.
Si bien se dio un paso importante con la llegada de las maquinarias, no es menos cierto que las cerca de 500 mil personas afectadas con las históricas inundaciones en la Mojana esperan que se cumpla con todos los compromisos que adquirió el Gobierno Nacional. De allí, la urgencia de solicitar la llegada de la segunda draga, que por fin ayer se dio.
Se avanza, eso no se puede desconocer, pero se requiere el acelerador en las obras y de allí la importancia de la labor de la ciudadanía ejerciendo veeduría sobre estas.