La Universidad de Sucre le apuesta a la generación de alternativas para la producción de energías limpias y con ello al mejoramiento de las condiciones medioambientales regionales.

En la actualidad ejecuta un proyecto para la producción de energía a través de los residuos agroindustriales como es el caso de cultivos de ñame, yuca, arroz y maíz.

En este proyecto trabajan 20 personas, entre docentes y estudiantes con un costo de 10.308 millones de pesos.

Proyectos aprobados

El proyecto hace parte del paquete de 14 que le fueron aprobados a la División de Investigación de la Universidad por parte del Ministerio de Ciencia Tecnología e Innovación, por un valor cercano a los 44 mil 715 millones de pesos y en la reciente convocatoria fueron aprobados otros 2 proyectos por 17 mil millones de pesos.

De acuerdo con Jairo Salcedo Mendoza, director de la División de Investigación, el proyecto implica el diseño y construcción de los equipos, y al final, la construcción de una planta piloto para el departamento de Sucre.

La iniciativa debe ejecutarse en 5 años, de los cuales han transcurrido 14 meses.

Se busca aprovechar los residuos de las plantas de producción de almidones, grandes y pequeñas para la producción de energía mediante procesos de pirólisis (descomposición química de materia orgánica por altas temperaturas en ausencia de oxígeno) para la generación de biometano o hidrógeno.

En Sucre hay 2 grandes plantas de procesamiento agroindustrial y otras 37 pequeñas y medianas, lo cual sería suficiente para hacer sostenible el proyecto.

Según el director de investigaciones, en la actualidad la Universidad de Sucre cuenta con 31 grupos de investigación que manejan proyectos en su mayoría en sectores de salud, agroindustria y transferencia e innovación.

La finalidad de la entidad es formar capital humano y soluciones a los problemas de transferencia de tecnología e innovación, en beneficio de la población sucreña y de la agroindustria.