“Teníamos una líder, ahora una guerrera”

Por: Yeiner Estrada Morelo.
Redacción. La llegada de Natalia García Corrales, de 38 años, a la empresa de innovación y tecnología que lidera el  ingeniero de sistemas, Elkin Quiñónez Agámez, en Montería, ha sido una gran bendición. Así lo afirma el jefe de la ingeniera industrial que pasó de liderar varios procesos laborales en la compañía en la que está hace aproximadamente dos años, a liderar una batalla por superar un cáncer de mama que, por fortuna, pudo detectar a tiempo y contar con el apoyo de la familia, amigos y, por supuesto, un grupo de trabajo que no dudó ni un instante en apoyarla, pues para Quiñónez Agámez, “había llegado el momento de  respaldar a una gran mujer. Pensábamos que teníamos una gran líder, pero verla superar una situación compleja nos hizo saber que realmente tenemos en la empresa a una  guerrera.

“Como su jefe siempre pensé en ayudarla, en lo laboral y personal. Tras su diagnóstico decidimos dejarla en nómina y decirle que se dedicara únicamente a su tratamiento, pero es tan proactiva que era difícil detenerla”, relata Quiñónez Agámez.

Y es que Natalia viene de perder a su padre hace 16 años por un cáncer y de acompañar a su madre que también ha padecido los embates de esta dura enfermedad, historia que también se repitió en la familia de Elkin, quien perdió a su suegra a causa de este padecimiento, razón por la que al enterarse de lo que padecía su compañera no dudó en apoyarla en todo lo que necesitara, “más aún cuando primero se piensa en la muerte al recibir una dura noticia como esta”, dice Elkin, quien manifiesta además: “Yo le decía que no trabajara, que se quedara en casa o hiciera lo que ella pudiera, pero Natalia es muy fuerte y proactiva, y le es muy difícil quedarse quieta, en verdad que nos enseña mucho, tan así que nos ha inspirado a realizar proyectos desde la tecnología e innovación que nos permitan ayudar a socializar temas como la prevención y detección temprana de esta enfermedad”.

Es así como muchas personas como Elkin se inspiran en la fortaleza de Natalia, mientras ella continúa su vida bajo los respectivos tratamientos y dedicada a sus cátedras estudiantiles y su labor como ingeniera.
“Sigo con mis sueños intactos, hoy veo la vida de otra manera, con ganas de luchar y de ayudar a que otros puedan superar situaciones difíciles. Soy creyente en Dios y sé, como desde el día uno de mi diagnóstico, que esto no sería el fin”, dice Natalia entre la tranquilidad que le genera saber que cuenta con personas como Elkin, que siempre han estado atentos a su proceso.

Realmente, Elkin es un líder de esos que tanto se necesitan para ayudar a sus compañeros a darle más valor a la vida, por encima de lo laboral.

Elkin Quiñónez Agámes y Natalia García Corrales, dan ejemplo de lo que es una extraordinaria relación laboral, en la que prima lo humano. Foto: @laamstudio.