24 de abril de 2024
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Sorprendente y escandaloso

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6 de dic. de 2022

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Por: Narcés Montes Buelvas.

 En todo gobierno nuevo es de lógica y aceptable los cambios, sobre todo cuando se propone un sistema nuevo, bueno, distinto de “paz total”, pero algunas propuestas innovadoras fueron tan absurdas como inaceptables, tanto que no llegaron a legalizarse, fueron retiradas de insofacto, como la supresión de la explotación petrolera, que modestia aparte es un rubro importante, trascendental, por mantener nuestra economía en considerable porcentaje, sobre todo ahora que han aumentado su precio y producción.  La última propuesta escandalosa, tan insólita como absurda, al extremo que nadie sabe quién la propuso o al menos todos los legisladores negaron hacerla, solo se lavan las manos acusando esbozarla la Corte Suprema. El bombazo fue escandaloso, casi un chiste por autorizar al niño o niña a cambiar de sexo desde los cinco años, aun contra la voluntad paterna, cuando a esa edad ni siquiera se ha logrado completar la formación del cerebro por nacer incompleto y menos por no conformar su criterio que apenas empieza a madurar a los 18 años. Sería correcto siempre y cuando sus padres o tutores lo guíen bien, con el agravante que ahora último está prohibido hasta el “chancletazo” y peor aún cuando los jóvenes “Ni-Ni” no quieren trabajar ni estudiar por irresponsables e inmaduros,

El cambio de sexo se justifica a mayor edad, siempre y cuando fisiológicamente sus manifestaciones sexuales sean protuberantes y justificables, pero a mayor edad porque su personalidad debe respetarla hasta el gobierno, quien es el más obligado aclarar la definición sexual de cada quien, aunque muchos lo consideren aberrante por estar fuera de lo normal, pues la naturaleza en la mayoría de las especies es bisexual (hembra y macho), por eso a muchos les escandaliza la transexualidad, más aún existen excepciones de fenómenos bisexuales o sea que tienen ambos órganos sexuales. Antes de proponer leyes absurdas deben preocuparse por controlar la pedofilia, la pederastia, el secuestro, la alimentación y educación infantil, no en estar controlando las ambulancias que llevan niños enfermos y hacerlos andar en sillas de ruedas dizque por controlar fronteras como sucedió recientemente en la frontera con Venezuela. Castigar enérgicamente las ratas de las asignaciones del PAE que alimenta niños necesitados, hasta ahora son muchos los penalizados y muy escasos encarcelados, de pronto en casa por cárcel que nunca controla INPEC. Lo peor es que nos ufanamos de nuestra infancia por considerarla el futuro patrio, así es, pero muy abandonada y maltratada.