La situación que viven los ganaderos en Sucre es de hace muchos años y al trazar línea las soluciones han sido decisiones paliativas más que todo para calmar los ánimos en algunas ocasiones. Extorsión, abigeato, secuestro y hasta muerte han tenido que sortear propietarios y sus familias y lamentablemente al sol de hoy las cosas siguen iguales o quizás peores. ¿Será que esto tendrá que seguir siendo una conducta repetitiva? Nos rehusamos a creer que las autoridades, especialmente policiales y militares, carezcan de herramientas para acompañar a un gremio que genera empleo, riqueza y economía en Sucre, como lo hacen otros. ¿En qué está contribuyendo la Tasa de Seguridad en ellos? ¿Por qué no existe una política de seguridad desde las administraciones locales para ellos? Si bien los ganaderos son capaces de resistir, tampoco es justo que la institucionalidad los deje solos en estos momentos en los que en manos de un gobierno de izquierda las cosas se recrudecen cada día más. Hay que buscar alternativas y una solución. ¡Urgente!

La Tasa de Seguridad no ha servido para nada en Sucre. Las cosas siguen igual.

Autor: Luis Germán Rubiano Farak.