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Mujer taxista en Sincelejo, en una crisis encontró una oportunidad

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19 de mar. de 2023

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Por: Paulina Jaramillo Mendoza.

En muchas oportunidades, cuando a nuestra vida llega una vicisitud, aparece con el propósito de encontrar en esa crisis, la oportunidad de movernos de lugar o en su defecto, de cambiar algo en nosotros para un beneficio mejor que nos daremos cuenta con el paso del tiempo.
Es en el punto de quiebre donde nuestra verdadera esencia sale a flote y pelea la batalla y en algunas ocasiones no hay contrincante, la disputa es entre nuestro yo que se encuentra aferrado del otro lado del rin a lo que podríamos llamar zona de confort.

La historia de Yolanda
Así le cambió la vida de un momento a otro a la bogotana, Diana Yolanda Aldana Villamil, quien en un momento de su existencia tenía todo organizado a tal punto de sentir plenitud y paz en las fichas que había elegido para jugar el juego de la vida, pero no siempre por tener el juego planeado en nuestra mente quiere decir que ganaremos la partida. Diana Yolanda dialogó con este medio y le manifestó que a la edad de 20 años tuvo la fortuna de tener su primer hijo y a sus 23 su segundo hijo. "Por designio de la vida y porque Dios lo quiso a la edad de 25 quedé sola con mis hijos, por motivo de separación, desde esa fecha tomé la decisión de emprender una aventura y un desafío que es ser mamá soltera y ver mis hijos tan pequeños en indefensos me llenó de motivación y de fuerza para luchar y esforzarme por darles una buena enseñanza, un buen ejemplo de superación y de valentía", indicó Aldana Villamil.
En medio de la crisis y las dificultades que se encontraba viviendo en ese momento de su vida y pasando cada prueba, siempre acompañada de su padre Desiderio Aldana Guerrero, y su madre Luz Dary Villamizar, esta mujer siempre buscaba las fuerzas escondidas en su interior para salir adelante.
Además, de compartir tiempo con su padre, quien era conductor de un bus y su madre siempre estaba con él, ella era quien gritaba en el bus, la ruta para donde iban, después su padre pasó a manejar un taxi, ella en ese momento de su vida aprendió empíricamente a manejar porque siempre se dedicaba a ver su padre mientras este lo hacía, poco a poco empezó aprender del oficio de su padre y empezó a surgir en ella el interés por ser conductora. "Dios y la vida me han dado la oportunidad de pasar por diferentes trabajos en la vida", indicó Diana Yolanda.

Cambios positivos llegaron
Una vez que el tiempo pasó y las aguas turbulentas en la vida de Yolanda se calmaron, la mujer por asuntos de trabajo de sus hijos tuvo que emprender un nuevo camino y llegar a tierras sucreñas. Cabe indicar que Sincelejo, se convirtió en ese lugar seguro para ella y su familia, quienes en septiembre del año pasado tocaron piso sabanero y empezaron a desempacar sus maletas cargadas de sueños e ilusiones por cumplir. Yolanda en exclusiva le contó a este medio que, “Hace cinco meses tuve la oportunidad y el privilegio de ingresar a este lindo gremio de taxistas el cual en su mayoría me recibieron con agrado y con alegría al ver que era la primera mujer taxista en la ciudad de Sincelejo, he recibido por parte de mis compañeros palabras de motivación y de ánimo, me han agregado a su grupo de una manera muy cordial y amena en especial mi grupo la bahía del éxito las Peñitas donde pertenezco, me han hecho sentir parte de ellos siempre con respeto, aprecio y admiración”, manifestó Diana Yolanda.

“Sincelejo me ha abierto las puertas para seguir siendo esa mujer guerrera y luchadora"

Las expectativas de la primera mujer taxista en Sincelejo al ingresar a este gremio fueron el poder apoyar en su casa económicamente. Manifestó además que algún día espera poder ejercer su labor desde su propio vehículo.

Diana Yolanda Aldana Villamil, mujer taxista en Sincelejo.

Mensaje a la sociedad
“De esta manera instó y motivo a todas las mujeres Sincelejanas a que nosotras, si podemos que no hay ninguna limitación para ejercer alguna profesión, la mujer es guerrera, es valiente y esforzada, no podemos limitarnos por comentarios porque nos vayan a catalogar. Sí se puede y así como yo sé que hay muchas mujeres en esta ciudad y el mundo entero que hacen lo mismo”, indicó Yolanda.