EE.UU. El gobierno de los Estados Unidos anunció que a partir del 11 de mayo, los migrantes de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Haití que sean detenidos por cruzar la frontera de manera irregular serán deportados a México y se les prohibirá entrar al país por cinco años.

De esta manera las autoridades estadounidenses buscan desestimular la llegada de ilegales a su país violando las normas de migración, pero además de ello, acabar con las redes de traficantes de personas que hace de este un negocio que mueve millones de dólares al día.

Esta medida hará más difícil el cruce de la frontera ya que las penalidades serán mayores. "Entonces realmente alentamos a las personas a quedarse donde están para acceder a vías legales [de migración]. Este cambio hará que sea mucho más difícil cruzar la frontera suroeste", señalaron fuentes de migración de los Estados Unidos.

El gobierno también informó la creación de centros migratorios en Colombia y Guatemala, donde las personas podrán acceder a algunas vías legales de migración, como obtener el estatus de refugiado, programas para reunificación familiar y permisos laborales.