El régimen de Nicolás Maduro y la oposición venezolana reanudaron las negociaciones en México, luego de 15 meses de interrupción.

Aunque habían llegado a una serie de acuerdos parciales, horas después el mandatario declaró que "no permitirá imposiciones" demostrando su inconformidad ante lo pactado.

Por esta razón la oposición democrática, reunida en la Plataforma Unitaria, le respondió mediante un comunicado, indicando que "el régimen ha activado una serie de acciones que buscan zafarse de los acuerdos producto del mecanismo de negociación de México y que tiene como siguiente paso continuar, en el mes de diciembre, la negociación en los temas políticos y de libertad, que son el anhelo principal de los venezolanos: la libertad de nuestros presos políticos, el retorno de millones de familiares y exiliados a nuestro país y decidir nuestro destino con el voto libre".

Así mismo, la oposición le exige al jefe de Estado que no debe retardar el compromiso asumido en México y que proceda de inmediato a fijar una fecha lo antes posible para continuar con lo pactado.
Ante esto, mediante el diálogo, Maduro impone la condición de conseguir que se suspendan todas las sanciones que pesan sobre su administración y altos funcionarios de su gabinete.