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Por: Ismael Guerra de la Ossa
Gustavo Bolívar, quien renunció el pasado 31 de diciembre al Senado con el objeto de escribir una novela para el Canal RCN, según dijo, o para poder aspirar a la alcaldía de Bogotá o la Gobernación de Cundinamarca en las elecciones del próximo 29 de octubre, ha seguido mojando prensa. Unas de las últimas veces han sido por sus denuncias sobre trata de blancas en el Congreso y la otra por sus vaticinios en materia electoral. En la primera se le critica porque no hizo tales denuncias, graves, por cierto, cuando estaba en el Senado de la República y prefirió hacerlas por fuera de esa corporación, lo que no se considera lo más apropiado, pero sus razones tendría. En cuanto a la segunda, se le cuestiona porque pareciera que alucina en sus predicciones para el Pacto Histórico (PH), con respecto a los resultados que obtendría en las elecciones de octubre. Pronostica Bolívar que en dichos comicios el PH obtendría 600 alcaldías de las 1.104 que entrarían en juego, es decir, el 54,34 %. En cuanto a concejales, predice Bolívar que el PH sacaría 3.000, o sea el 24, 85 % de los 12.072. Sobre las gobernaciones, Bolívar vaticina que el PH se alzaría con la mitad de las 32, ganaría 16.
En cuanto a diputados, aquí sí que se fue de bruces el exsenador Gustavo Bolívar, pues predijo, sin rubor alguno, que el Pacto Histórico (PH) elegiría 600 diputados, cosa imposible si se tiene en cuenta que Colombia lo que elige son apenas 418 diputados, según la Registraduría Nacional del Estado Civil.
Ahora bien, los resultados para el PH en las elecciones de octubre dependerían, indiscutiblemente, de la gestión del Gobierno Petro, de aquí a ese mes, sobre todo en lo económico y en los diálogos con los grupos armados, para nombrar solo dos de los grandes temas en que el foco de la opinión pública estará centrado. En lo económico, se da por seguro que la cascada de impuestos que padecemos los colombianos, contemplada en la reforma tributaria, le pasará factura de cobro al Gobierno y a su partido (PH). Y sobre la política de Paz Total, la cosa está más enredada que “una bola de hilo en la pata de un pollo”, sobre todo con Eln. ¿Será esto un buen presagio para las predicciones de Gustavo Bolívar?