Hoy en el Día del Médico rendimos homenaje a quienes día a día dedican sus vidas al propósito de salvar las de otros. Cada uno de los actores de la salud trabaja para extender un poco más el tiempo de vida de aquellos que los necesitan. Es una labor abnegada, un propósito inconsciente, que contribuye a la prolongación de los sueños y metas del prójimo.

En su honor
El día del médico se celebra en honor al médico cubano Carlos Juan Finlay Barrés, nacido un 3 de diciembre de 1833.
Finlay Barrés confirmó la teoría de que la propagación de la fiebre amarilla era a través del mosquito Aedes aegypti, un hallazgo de trascendencia mundial que evitó miles de muertes en América latina. Durante las guerras por la independencia cubana fue convocado por el ejército de EE. UU. para que analizara las bajas de los soldados por la fiebre amarilla y allí comprobó que el mosquito antes mencionado era el transmisor de dicha enfermedad.

Cada uno de ellos con compromiso, valentía y amor han expuesto su vida misma para salvar la de quienes más lo requieran.

El ser médico es más que un oficio, es dedicación, esmero y amor por la humanidad.
Ser médico es más que atención, es una palabra de aliento y un gesto de amor con el paciente.

La medicina y su historia
Hipócrates era un médico griego nacido en la isla de Cos, Grecia, el año 460 aC. Fue visto como el médico más grande de todos los tiempos y basó su práctica médica en la observación y el estudio del cuerpo humano. Rechazó los puntos de vista de sus contemporáneos, que consideraban que la enfermedad era producida por supersticiones, como la posesión por espíritus diabólicos o la caída del favor de los dioses, y sostuvo que la enfermedad tenía una explicación física y racional. Por esto se le considera el fundador de la medicina. Desde la antigüedad esta milenaria profesión fue guiada por diferentes autores médicos considerados eminencias y eruditos en todo lo relacionado a esta. Basándonos en la importancia de la medicina y como cada actor de la salud debía enfrentarse y entregar todo en el momento requerido por el paciente, se vio la necesidad de construir el "Juramento de Hipócrates".

Este juramento fue escrito como un lineamiento de ética médica y aunque las palabras exactas han cambiado con los tiempos, el contenido general es el mismo: un juramento de respeto para aquellos que impartieron su conocimiento sobre la medicina y para los pacientes, así como la promesa de tratarlos con el mejor conocimiento médico. Fue evidente a nivel mundo el cambio tan abrupto que todos debimos enfrentar con la llegada del Covid-19 hace aproximadamente dos años. Sin embargo, ustedes se convirtieron en ángeles y en guerreros que, día a día, noche tras noche, se enfrentaron a situaciones imposibles de descifrar y llenas de emociones y sentimientos encontrados por elegir primero la vida del prójimo antes que la de ustedes. Y por eso, gracias totales.

Talento humano y dedicación al servicio de la vida

En Colombia la oferta de medicina en general ha venido en aumento en los últimos años y Sincelejo y Sucre no son ajenos a este crecimiento. Según el Banco Mundial, en 2018 en Colombia el promedio era de 3.8 médicos por cada 1.000 colombianos, pero esto cambió con la pandemia por el covid-19, tras la cual se aumentó sustancialmente el talento humano en salud y la infraestructura.

Los avances
En Sincelejo y Sucre, en los últimos 7 años, ha habido importantes avances, en especial, en áreas como neurocirugía y neuropsicología, donde hoy se practican pruebas funcionales y mapeos mentales, cosa que antes debía hacerse en ciudades y departamentos vecinos. La cardiología también ha avanzado de manera significativa. El personal en esta rama de la medicina ha crecido en número y en cualificación con formación en el exterior. En la actualidad en Sincelejo se practican diversas cirugías cardiovasculares y se realizan tratamientos en hemodinámica (es el estudio del movimiento de la sangre a través del sistema vascular).
En todas estas áreas se ha avanzado tanto en la oferta institucional como en la cantidad y calidad del talento humano.

Más especialistas
Especialidades como la urología han mostrado avances importantes en el departamento de Sucre por la disponibilidad de especialistas en la materia.
También se ha incrementado la oferta en lo que se denomina las subespecialidades, como es el caso de cardiología infantil o neuropediatría.
Se destaca el aporte del sector privado en la inversión en la infraestructura de servicios de salud.
Es así como hoy se cuenta con laboratorios de cuarto nivel, certificados por las autoridades de salud.

La medicina en Sucre ha crecido, tanto en talento humano como en infraestructura de servicios.

Una de las mayores dificultades que se tenía hace 8 años era la falta de ambulancias medicalizadas y hoy existe una variada oferta en el departamento.

Formación
Este crecimiento del sector salud se evidencia, además, en el surgimiento de centros de formación en enfermería y fisioterapia, así como la apertura en la Universidad de Sucre de una facultad de medicina.

Autor: El Meridiano.