En un día como hoy que se celebra el Día del Médico es pertinente resaltar la labor académica del programa de Medicina de la facultad de Salud de la Universidad de Sucre, el cual trasciende los límites de la infraestructura para llegar a los territorios, estrategia que le da bases a los estudiantes con el fin de fortalecer sus cimientos de aprendizaje.

El programa de Medicina hace parte de la oferta académica de la facultad de Ciencias de la Salud entre los que están, además, fonoaudiología, regencia de farmacia y enfermería. La primera promoción fue en 2012, estudiantes que comenzaron a estudiar en 2007. Tiene 40 cupos para el desarrollo del programa académico, haciendo uso de los escenarios de prácticas formativas, en los semestres, y las rotatorias, con el internado, en los dos últimos semestres.

Actualmente hay 52 docentes repartidos en los 5 semestres del programa de Medicina. Hay convenios con al menos 5 escenarios de prácticas para los estudiantes en Sincelejo y Corozal, rotando con distintos docentes.

La médico Yolima Gómez Medina, jefe de Departamento de dicho programa, detalló los ejes misionales del programa, en los que se destacan la proyección social, lo cual determina la importancia y liderazgo de los egresados de esa alma mater.

"Uno de los ejes misionales es la formación, la investigación y la proyección social. Este es uno de nuestros distintivos fuertes porque avanzamos mucho en estas actividades al proyectar el conocimiento que el estudiante obtiene en la parte formativa a la comunidad en atención, diagnóstico de riesgo, identificación factores de riesgo en las familias y de allí se trazan metas preventivas. Medicina interna tiene una rotación en la comunidad, poniendo en práctica con la gente, así mismo, cirugía, pediatría y ginecobstetricia. En extensión y proyección social podemos hacer actividades enmarcadas en cinco proyectos: por ejemplo, salud escolar, es un proyecto, al igual que atención a la familia y comunidad, atención maternoinfantil, intervención al joven y atención integral al adulto mayor", explicó.

En el territorio

En Sincelejo trabajan principalmente en la zona suroriental, la cual históricamente ha sido vulnerable. Igualmente, en la comunidad de Incora-Puerta Roja, a cargo de los docentes Jorge Vergara, María Esperanza Elle y Guillermina Gastelbondo, como gestores de proyección social.

"Por ejemplo, yo hago actividades de salud mental con mis estudiantes en las familias. Hacemos el organigrama, funcionalidad, factores de riesgo y proposiciones para mejorar los hogares. En proyección social se miden los indicadores, por ejemplo, cuántas brigadas, cuántos exámenes, actividades educativas. El impacto se ve en el cambio que hay en las comunidades, porque eso es lo que se busca, un cambio", acotó.

Agregó, además, que "el estudiante tiene incentivos, lo cual logra que baje la deserción. Uno de ellos es la monitoría académica con la que el estudiante se inscribe y cumple varios requisitos, hay dos cupos para matrícula de honor, con el pago total de la matrícula, al igual que rendimiento académico, con el pago del 50% de la matrícula", indicó.

El programa de Medicina tiene semilleros de investigación con un plan que es presentado cada semestre. La docente Viviana Ruiz es la coordinadora del plan, ella cuenta con doctorado en Medicina Tropical, también la doctora Nerlys Pájaro y los docentes Édgar Vergara y Jáider Hernández. Algunos pertenecen a la Asociación Colombiana Médica de Estudiantes sirviendo como impulso para la investigación”, indicó.

Se resalta que todos los docentes son de alta calidad, lo cual se refleja en los resultados positivos que se convierten en referencia y también por el seguimiento académico a los estudiantes, pautados por su entorno familiar, necesidades, rendimiento y proyectos, brindando apoyo para su continuidad. 

Por ser la única universidad pública de la Sabana, de Sucre y Córdoba, con el programa de Medicina, Unisucre se convierte en un referente que muestra que el aprendizaje debe salir de las aulas, y de eso dan fe todos los que lo hacen posible. 

Por ello y más, el personal médico, en ejercicio y en formación, debe ser exaltado por su excelente labor, compromiso, dedicación, sentido de pertenencia, convirtiéndose en modelo de vida, esas personas que piensan en los demás y siempre tienen una mano amiga para atender a sus semejantes.