Dura situación está enfrentando el nuevo gobierno de Dina Boluarte, a pocos días de asumir el mandato de la Republica de Perú, aún sin terminar de juntar los pedazos rotos que dejó el destituido presidente de izquierda Pedro Castillo, inician nuevas amenazas a su gobierno.

A pesar de mantener buenas relaciones con el congreso, a diferencia del exmandatario castillo, esta hazaña no le ha sido suficiente para asumir el control del país, teniendo en cuenta que su figura gubernamental llegó debilitada tras la crisis y los pronunciamientos del expresidente.

Cabe destacar que ayer martes, la Justicia peruana rechazó la apelación del expresidente Pedro Castillo, por lo que continuará detenido. El juez supremo señaló que, aunque no se llegó al alzamiento en armas, en el video de sus declaraciones se muestra la intención de Castillo de cerrar el Congreso

Protestas masivas.

Aunque en los primeros días de su mandato no se presentaron las protestas esperadas en favor a castillo, luego de sus declaraciones para adelantar las elecciones en el año 2024, detonó que en el país iniciaran fuertes protestas en contra de esta decisión y en favor del detenido mandatario.

Decenas de opositores han bloqueado carreteras principales, dos aeropuertos, lo que ha provocado el cierre de servicio de trenes hacia la ciudadela de Machu Picchu. Estos hechos han dejado a 7 personas sin vida, entre ellos un menos de edad.

Los marchantes aseguran que el tiempo de mandato de Dina Boluarte es muy extendido, por lo que le exigieron acudir de inmediato a las urnas, elegir nuevo Congreso y presidente, y de esta manera tratar de sacar al país de la profunda crisis institucional que enfrenta.

Ante esta situación la jefe de estado indicó que “La vida de ningún peruano amerita ser sacrificada por intereses políticos” lamentando la muerte de los marchantes.

Por otra parte, la ira de los manifestantes se ha tomado las calles de la nación y ponen a prueba la resistencia de la presidenta, que el día de ayer declaró un estado de emergencia "en las zonas de alta conflictividad social".

El respaldo a Castillo

Los gobiernos de izquierda, defensores de Castillo como Argentina, Bolivia, Colombia y México expresaron “su profunda preocupación por los recientes sucesos que resultaron en la remoción y detención de José Pedro Castillo”, a través de un comunicado conjunto en el que desconocen a Boluarte como presidenta de Perú.

El panorama que enfrenta el país obliga a la mandataria a tomar una fuerte posición y evitar que entes externos interfieran su gobierno y en las decisiones que encaminen a retomar el control nacional.