20 de abril de 2024
Tendencias

© 2023 El Meridiano.

Cara e Gato

Por
27 de feb. de 2023

Compartir con:

thumbnail

Por: Rafael González Guerrero.

La Mojana es “una planicie de la depresión Momposina donde confluyen los ríos Cauca, Magdalena, San Jorge, Caribona y Nechí. Este complejo hidráulico conforma un importante sistema de ciénagas, quebradas, caños y humedales, que desempeña un papel regulador de los caudales de los ríos, constituyendo un reservorio natural de agua que tiene una gran biodiversidad de fauna y flora silvestre.”

El concepto Mojana es, entonces, el de tierras supremamente fértiles por la disposición misma de la naturaleza. Su principal fuente de desarrollo es la agricultura, acompañada de la ganadería trashumante. Allí se cultiva, principalmente, el arroz en todas sus variedades. Por ser tan fértiles sus tierras, hacen dos cosechas al año. Hoy, está inundada porque el agua se llevó un cierre mal hecho en Cara e Gato, y porque cada gobierno pretende imponer su propia fórmula sin la necesaria continuidad para el buen éxito de siquiera una de ellas.

En nada quedan las ejecutorias sobre las obras de sedimento, diques, jarillones, navegabilidad de ríos y caños, pues hay que seguir con la construcción de los diques fusibles en los rompederos de Santa Anita y Potrero Nuevo, así como en las localidades de Tenche y Las Brisas, de los cuales solo uno se ha construido; alcanzar la canalización de los caños para que estos sirvan de vertederos del excedente de aguas y la construcción de un dique marginal entre las poblaciones de Colorado (Antioquia) y las Brisas (Bolívar), etc. etc., pero lo que realmente está demostrado como buen resultado es la regulación de las aguas.

El río Cauca está regularizado con la construcción de la represa de Hidroituango. Desde la población de Nechí hacia arriba, hoy no existe ninguna clase de aguas amenazantes para las poblaciones ribereñas. Hay otros ejemplos. Urra I normalizó todas las inundaciones en el bajo Sinú, incluyendo a Montería. Igual en China con la represa de las Tres Gargantas, la más importante del mundo.

Hay, entonces, que regular el Nechí, con un proyecto hidroeléctrico del Ministerio de Minas que data de 1997, según el cual tiene un caudal medio de 830 metros cúbicos por segundo, recorriendo unos 250 kilómetros con muchos afluentes, que le vierten sus aguas al Cauca, lo que produce un aumento sustancial en su caudal, generando los problemas que hoy tenemos en nuestra Mojana sucreña.

Cara e Gato se debe cerrar, pues eso garantiza la estabilidad de la ganadería y agricultura en esa región, para después comenzar a hacer las obras que el señor Pava ha anunciado. Bienvenidas

PS. Además, no se debe culpar a las ejecutorias del pasado, ya que al presidente lo eligen para que gobierne a futuro.