Cereté. La cura resultó ser peor que la enfermedad. Lo que parecía traer alivio a las familias de la vereda San Antonio, en Cereté resultó trayendo más caos.
Hace unos días el alcalde Luis Antonio 'Toño' Rhenals inauguró con bombos y platillos la pavimentación que conduce de la vereda San Antonio a el corregimiento de Rabolargo.

Pero con los primeros aguaceros se ha evidenciado la falta de planificación que tuvo esta obra, pues los habitantes de la vereda afirman que ahora el agua ingresa a sus casas, ya que todas las calles desaguan hacia las viviendas de San Antonio. Esto ha desmejorando considerablemente la calidad de vida de estos pobladores que deben conviir en medio del lodazal.

Según la comunidad pusieron una tubería para que desaguaran las aguas lluvias en un predio particular, pero los dueños de la finca no fueron consultados y por ese motivo lo taparon.

"Así nos tiene 'Toño' Rhenals, vino a San Antonio hizo la obra de pavimentación y es el sector de la plaza el que recibe el agua de la vía, ya que la pusieron a botar a nuestros patios, nos quejamos por esto, hicieron una tubería de desagüe en un predio privado, los dueños de la finca no autorizaron y la taponaron. Hay quejas radicadas, solicitudes hechas y prevalece la indiferencia del Alcalde", afirman habitantes de la zona.

Así mismo, los pobladores señalan que unas zanjas quedaron inconclusas y una persona se hundió hasta la mitad del cuerpo en medio del lodazal después del aguacero caído sobre el municipio de Cereté.
Ahora la comunidad hace un fuerte llamado a la Alcaldía de Cereté, porque no es posible que una obra que no tiene 20 días de haber sido entregada presente problemas tan graves problemas. Además, que este proyecto tuvo una inversión de más 21 mil millones de pesos, en 6.3 kilómetros de pavimento rígido.